martes, 21 de junio de 2011

Wall y McGee, futuro capitalino

Los Wizards no son un equipo puntero y todavía dista mucho de serlo, eso está bastante claro, pero en la nefasta temporada de los capitalinos, los aficionados del conjunto de Washington han logrado vislumbrar dos ténues luces, dos focos de energía positiva al que intentarán agarrarse desesperadamente en su búsqueda de ilusión, buen juego y en definitiva triunfos, algo a lo que en Washington no están muy acostumbrados.



Las dos luces que observan los aficionados de los antiguos Bullets son las buenas actuaciones que han realizado en una esperanzadora temporada los talentosos jóvenes del equipo, John Wall y JaVale McGee.

Wall, último número uno del draft, quizás no ha cumplido las exigentes expectativas creadas en torno a su figura, unas expectativas posiblemente demasiado elevadas. El “point-guard” ha logrado cuajar una más que aceptable temporada donde solo la bestia Blake Griffin le ha impedido alzarse con el “ROY” (Rookie of the year).

Los 16’4 puntos, 8’3 asistencias (7º de la liga) y 4’6 rebotes de media esta temporada lo confirman como uno de los integrantes más sólidos del grupo de jóvenes bases con un presente y futuro esperanzador.

Grupo en el que se encuentran cracks como Derrick Rose, Rajon Rondo, Russell Westbrook, Chris Paul o Deron Williams, jugadores que se encuentran uno o dos escalones por encima del base de los Wizards pero en donde también se pueden encontrar otros bases de un nivel parejo como son Stephen Curry, Tyreke Evans, Mike Conley o Brandon Jennings.

Su estela de megacrack creada en el instituto y el gran “hype” creado a su alrededor provocó grandes expectativas. Puede que para algunos la última temporada de Wall les halla defraudado, pero lo realmente sorprendente sería verlo jugar al nivel del que se hablaba en su primera temporada.

Tiene potencial pero lo increíble sería verlo anotar 24 puntos y repartir 11 asistencias en su año “rookie”, eso son palabras mayores que solo se encuentran al alcance de los “top” y de momento Wall todavía esta en camino. La progresión de John Wall es esperanzadora y en Washington saben de la vital importancia de John en el futuro del equipo capitalino.

La otra gran esperanza del equipo ha sido la buena temporada del poderoso JaVale McGee, el center había sido tildado en los últimos años de un simple “defender” y de un jugador bastante irregular pero en su tercera campaña, McGee ha explotado y ha sacado a relucir su gran potencial.

Como Wall, todavía esta lejos de ser una estrella, pero progresa adecuadamente. Sus 213 centímetros unidos a su gran capacidad de salto (unos ochenta centímetros, posiblemente el jugador que más alto ha saltado en la historia de la NBA) hacen de él una bestia física, tanto ofensivamente a la hora de machacar o finalizar contraataques como defensivamente a la hora de taponar y rebotear.

Basta con demostrar su portentoso físico con este apunte: en el Verizon Center han tenido que cambiar de lugar la cámara instalada detrás del aro ya que JaVale se salía del encuadre debido a su poderoso salto.

Su selección de tiro es poco fiable, alejado del aro su peligro se reduce considerablemente, ya que su muñeca es bastante mediocre. También debe dar un paso en cuanto a regularidad y consistencia si realmente quiere llegar a hacerse un nombre entre los mejores.

La próxima temporada termina contrato y los Wizards ya tienen en mente la oferta de renovación, conocen la importancia del center en el equipo y su buena compenetración con Wall.

Wall y McGee son el camino a seguir por los Wizards, un futuro basado en victorias debe pasar por una plantilla equilibrada con el base y el center realizando el papel de principales pilares.

(También publicado en Basketamericano.com)

miércoles, 4 de mayo de 2011

El orgullo verde del 69

Situémonos, 6 de mayo de 1969, los Lakers se preparaban para ganar su sexto anillo ante sus grandes rivales, los Boston Celtics.
Era el séptimo encuentro de las finales de la NBA y la fiesta ya estaba preparada en Los Angeles, pero al día siguiente el por entonces propietario de los Lakers, Kent Cook, se vio “obligado” a donar 10.000 globos a un hospital infantil, unos globos que la noche anterior colgaban en el mítico Forum de Inglewood preparados para ser soltados en señal de victoria.



Los Lakers acababan de lograr el fichaje de Wilt Chamberlain, el pívot se unía a los West y Baylor formando un conjunto temible, a priori superior al de los veteranos Celtics, un conjunto con una media de edad superior a los 30 años y con dos de sus grandes estrellas a punto de colgar las botas: Bill Russell y Sam Jones.

En un encuentro de la temporada regular, los Lakers demostraron su tremendo potencial, arrollando literalmente a los Celtics en su propia cancha, el Boston Garden.
Un marcador final de 73-108 dejaba en ridículo a los de Massachussets y encumbraba a los angelinos entrenados por Butch Van Breda Kolff como máximos aspirantes.

Ambos equipos lograron llegar a la soñada final, ambos con momentos de dificultad pero totalmente preparados para luchar por el título en plenas condiciones.
En los dos primeros encuentros, los Lakers fueron liderados por un genial Jerry West, el escolta logró anotar 53 y 41 puntos en los dos primeros encuentros, logrando dos victorias trabajadas ante los Celtics, 120-118 y 118-112.

Pero en el tercer encuentro, los Celtics lograron sacar un as de debajo de la manga, un inesperado como Siegfried secó prácticamente a West y de la mano de un inspirado Havlicek (34 puntos) lograron la victoria por 111-105.

El verdadero golpe para los Lakers fue en el cuarto encuentro, disputado en el Boston Garden, a falta de 10 segundos para el final del encuentro, los Lakers vencían por 87-88, pero una jugada desarrollada en la Universidad de Ohio por Havlicek fue ejecutada en aquel partido, un triple bloqueo y pase a un tirador abierto, un tirador llamado Sam Jones.

Jones logró anotar un tiro imposible, tras rebotar en todos los sitios posibles el tiro terminó entrando y dando la victoria a los Celtics por 89-88,
Una victoria que sacó de quicio a Van Breda Kolff y que ni el mismo se explicaba como podía haber entrado ese tiro.
El siguiente partido fue una victoria para los Lakers por 117-104, mientras los Celtics lograban poner el 3-3 tras una victoria por 99-90.

Se llegaba al séptimo encuentro, el conocido como “Balloon game”, los numerosos globos, las bandas preparadas para tocar y los itinerarios de campeones despertó el orgullo de los Celtics.

En los tres primeros cuartos del encuentro los Celtics lograban dominar el encuentro, pero en el último cuarto se logró volver a ver la mejor versión de Jerry West, mientras el héroe del cuarto encuentro, Sam Jones era eliminado por faltas y Chamberlain sacaba de quicio a Russell logrando sacarle la quinta falta.
Lo que parecía una victoria de los Lakers, repentinamente cambió de sentido tras una lesión de Chamberlain a cinco minutos para el final del encuentro.
Los Celtics ganaban por 103-102, pero el alero de los Lakers, Keith Ericsson lograba robarle el balón a Havlicek, pero la bola terminó en las manos del jugador de los Celtics, Don Nelson.

Nelson tiró como pudo y anotó una afortunada canasta, él mismo declaraba “El balón llegó a mis manoes casi sin tiempo y lancé. Agarré mal la bola, salió un tiro sin apenas rotación. Seguramente se trató del lanzamiento más afortunado de la historia de la NBA”.

Los Celtics ganaban en Inglewood, 106-108, Jerry West logró el MVP de la final pero el título de la NBA se marchaba para Boston.
Los orgullos Celtics sacaron a relucir su orgullo, aquel título era el gran broche para un equipo que marcó época.



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miércoles, 27 de abril de 2011

Kobe machaca el aro en el quinto partido contra los Hornets

En el quinto encuentro de la primera ronda de los Playoffs del Oeste, Kobe Bryant destrozó el aro con un espectacular mate contra unos Hornets que poco pudieron hacer para detener al 24 de los Lakers.



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martes, 12 de abril de 2011

Von Wafer y la jugada de su vida

En el partido de este noche, entre los Washington Wizards y los Boston Celtics (Victoria para los de la capital por 95-94), el escolta Von Wafer realizó la jugada de su vida, bromas a un lado, la acción del jugador de los Celtics no podía ser más desafortunada.
En primer lugar empezó a celebrar un mate fallado, luego entra en la pista y provoca que Jermaine O'Neal, que habia recogido el rebote, realice pasos, todo en ello en la prórroga del encuentro.



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viernes, 18 de marzo de 2011

La fórmula del éxito

El éxito es algo que persiguen todas las franquicias de la NBA. Pero el camino para alcanzarlo no siempre es el mismo. Después del boom del verano, en el que Chris Bosh y Lebron James se unieron a Dwayne Wade en Miami, parece que los Knicks van a seguir el mismo camino. Después de conseguir en verano a Stoudemire, se han hecho con Carmelo Anthony, pero, ¿han pagado un precio demasiado alto? eso es algo que solo se podra evaluar con el paso del tiempo. En un futuro se rumorea que pujarán por Chris Paul o Deron Williams para formar su particular "Big Three".



En el otro camino hacia el éxito otras franquicias apuestan mas por un bloque que sirva de apoyo a una o dos estrellas. Boston, San Antonio, Dallas, Chicago o LA Lakers son prueba de ello.

Ahora viajemos un poco en el pasado y analicemos las plantillas de los últimos equipos campeones:

- Los Angeles Lakers se han hecho con los dos últimos anillos, con una plantilla que sería una mezcla de los dos modelos.
- Un año antes, los Boston Celtics se alzaban con el anillo en el primer año de su "big three", y se les podría considerar los impulsores de esta tendencia actual.
- San Antonio Spurs conseguía en 2007 el cuarto anillo de la "era Duncan", que aunque cuente con estrellas, se acerca mas al concepto de plantilla larga y de bloque.
- Miami Heat, tras una exhibición de Wade en las finales de 2006, se alzaba con el anillo. Contaban con un Saquille O´Neal todavía dominante, pero la actuación de secundarios como Posey, Payton, Mourning, Williams o Haslem fue fundamental.
- Detroit Pistons sorprendió contra todo pronóstico a unos Lakers plagados de estrellas en las finales, gracias a una plantilla extensa en la que muchos jugadores aportaron su granito de arena.

Está claro que los dos caminos han dado muestras de éxito. Si acaso, parece que una plantilla extensa ofrece mas garantías que una corta, pero con mas jugadores referencia. Este año, y los venideros se podrá ver cual de los dos modelos consigue alcanzar dicho éxito.

sábado, 12 de marzo de 2011

Promesas: Jimmer Fredette

Nombre: James Taft "Jimmer" Fredette
Fecha de nacimiento: 25/02/89 (22 años)
Lugar de nacimiento: Glen Falls (New York, Estados Unidos)
Altura: 1´88m
Peso: 88kg
Posición: Base
Universidad: Brigham Young (Mountain West)
Clase: Senior
High School: Glen Falls High School
Número: 32
Previsión para el Draft: 10º



El espíritu de superación y la confianza en si mismo es algo que Fredette lleva en la sangre, el jugador nacido en Glen Falls (New York) siempre ha tenido muy claro donde terminaría: en la NBA.
Así lo relataba su hermano, al parecer el bueno de Jimmer ya afirmaba a los diez años que acabaría jugando en la NBA, de momento parece que no va mal por mal camino.

Tras realizar unos sensacionales años en época high school, logrando entre otras cosas ser el sexto máximo anotador histórico de New York, Fredette recibió doce ofertas de universidades pero finalmente recaló en la universidad mormona de Brigham Young, una universidad realmente estricta en cuánto a las normas religiosas, por ejemplo su compañero de equipo, Brandon Davies, fue suspendido para lo que resta de temporada ya que se descubrió que mantuviera relaciones pre-matrimoniales con su novia.

El base mormón realizó una primera temporada en la NCAA bastante discreta, jugando 18 minutos por partido y logrando anotar 7 puntos, repartir 1´7 asistencias y atrapar 1´1 rebotes por partido.
Las actuaciones de Fredette contribuyeron a lograr un récord de 27-8 y la consecución del título de conferencia de la Mountain West.
En su segunda temporada universitaria las cifras de Jimmer se dispararon, el base logró 16’2 puntos, 4’1 asistencias y 3´2 rebotes por encuentro.
Además comenzó a demostrar su gran solidez a la hora de lanzar, logrando un extraordinario porcentaje del 52% en triples.
Sus sensacionales actuaciones le valieron para ser incluido en el equipo ideal de la Mountain West.

En su tercera temporada, Fredette se consolidó definitivamente, el base logró mejorar aún más sus ya de por sí fantásticos números.
22´1 puntos, 4´7 asistecias y 3´1 rebotes y con actuaciones estelares como los 49 puntos ante la universidad de Arizona lanzaron a Jimmer al primer plano del baloncesto universitario.
Su temporada fue digna de enmarcar y cuándo muchos ya creían que el mormón daría el salto a la NBA, entre el 25º y 30º puesto del Draft, finalmente decidió quedarse otra temporada en la universidad de Brigham.



Esta temporada, Fredette esta confirmandos ser uno de los mejores, si no el mejor, anotador universitario, los elogios hacia su figura ya son constantes y su futuro ya es seguido por miles de personas.
Jimmer esta temporada ha logrado dar otro paso adelante, convirtiéndose en el máximo anotador de la NCAA con 27’3 puntos junto a las 4´3 asistencias y 3´4 rebotes por partido.
Cifras de auténtico crack, un estatus que de momento Fredette esta demostrando totalmente.

Su juego no hace más que recibir alabanzas, una muestra es el mensaje que dejó en su Twitter, Kevin Durant, dónde afirmaba que Fredette era el mejor anotador del mundo, eso son palabras mayores y más viendo quien las dice.
Se trata de un jugador que lo da todo en la cancha, su calidad a raudales no le impide ser sacrificado, se trata de un gran anotador, posee una buena cintura, con grandes movimientos y rectificaciones.
Uno de sus fuertes sin ninguna duda son los triples, Fredette esta deleitando a los aficionados de la NCAA con sus muchos recursos desde la línea de tres, convirtiéndolo en un jugador realmente imprevisible y muy difícil de marcar.
Sí le dejas espacio te clava el tiro y si te pegas a él se puede escapar con facilidad.

Habilidoso, confiado y eficaz, su tiro es envidiable pero también se trata de un jugador con muy buen manejo de balón que unidos a sus imprevisibles cambios de ritmo hacen de él un jugador hábil tanto en estático como en movimiento.
Se trata de un jugador bastante creativo, mucho menos que por ejemplo Kemba Walter pero con mucha más capacidad de anotación.

Su mecánica a la hora de lanzar es extraña, pero que se lo digan por ejemplo a Bonner, Fredette arma el brazo rápidamente y logra una gran elevación, pese a su extraña forma de lanzar consigue unos excelentes resultados.
Quizás le falta algo de explosividad y debe mejorar en cuánto a su número de asistencias pero esto último no preocupa demasiado ya que pese a no dar un alto número de asistencias, se trata de un jugador inteligente y que mueve realmente bien el equipo.
Su gran punto negro es la defensa, Fredette es un jugador al que le cuesta defender, a la hora de defender parece más pesado y lento, incapaz de llegar de molestar en muchas ocasiones a su tirador, sin duda es la gran mancha de Fredette, una mancha que se puede acentuar mucho más en la NBA.

Las previsiones para el Draft del 2011 sitúan a Fredette en el puesto número diez, personalmente el base de Brigham Young me parece una de las grandes perlas del próximo Draft y un jugador muy a tener en cuenta para el futuro más próximo de la NBA.



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martes, 8 de marzo de 2011

Leyendas: Scottie Pippen

Nombre: Scottie Maurice Pippen
Fecha de nacimiento: 25 de septiembre de 1965
Lugar de nacimiento: Hamburg (Arkansas)
Altura: 2'01m.
Peso: 95kg.
Posición: Alero
Draft: 1º ronda (5º puesto) por los Seattle Supersonics

Trayectoria:
- 1987/98: Chicago Bulls
- 1998/99: Houston Rockets
- 1999/03: Portland Trail Blazers
- 2003/04: Chicago Bulls

Palmarés:
- 6 campeonatos de la NBA (1990/91, 1991/92, 1992/93, 1995/96, 1996/97 y 1997/98)
- 7 veces "All-Star"
- 1 vez MVP del "All-Star" (1994)
- 2 oros olímpicos (Barcelona 1992 y Atlanta 1996)
- En el equipo ideal del 50º aniversario de la NBA
- En el "Hall of fame" (2010)
- 8 Veces en el primer equipo defensivo.
- Líder en robos de balón de post-temporada de todos los tiempos.
- 7 Veces en el primer equipo del año de manera consecutiva. (1992/98)



El mejor actor secundario de la historia de la NBA, así podríamos definir a esta joya del baloncesto que nació hace 45 años en Arkansas.
Pippen era un jugador capaz de asistir como el mejor, rebotear como el mejor, defender como el mejor, anotar como el mejor pero sobre todo jugar en equipo como el mejor, viendo sus números y sus títulos se hace extraño pensar que fuera el segundo jugador de su equipo pero jugar al lado de Jordan es lo que tiene.
Desde mi punto de vista fue la pieza clave en los únicos 6 anillos de la historia de Chicago, para mí simplemente Scottie ha sido de lo mejor que ha habido en una cancha.

Scottie acudió a la Universidad de Arkansas Central (una universidad que no competía en la NCAA) y en su último año llegó a promediar más de 26 puntos y 10 rebotes; ésto último hizo que fuera drafteado en el número 5 del Draft de 1987 (en ese Draft salió otro Hall of Famer: "El Almirante" Robinson).
En principio fue escogido por Seattle Supersonics, pero en seguida fue traspasado a Chicago a cambio de Olden Polynice.
Poco a poco fue demostrando su valía en el equipo y los Bulls miraban con ilusión al futuro de la mano de Michael y Scottie.

En 1992 Scottie fue seleccionado para formar parte del Dream Team que arrasaría en Barcelona (posiblemente el mejor equipo de la historia) y realizó un notable torneo en el aspecto individual.
En 1993 la conexión Michael-Scottie ya le había dado a los Bulls 3 anillos consecutivos, ese año Jordan anunció su retirada lo que dejaba a Pippen al mando de un equipo que venía de ganar 3 anillos consecutivos.
No lo hizo mal, ganó el MVP del All-Star Game de 1994 y llegó a las semifinales de conferencia, pero para un equipo que viene de arrasar en la NBA, llegando a convertirse en toda una dinastía, las semifinales de conferencia son un fracaso.



Scottie Pippen estuvo a punto de ser traspasado a Seattle (el equipo que le drafteó) a cambio de Shawn Kemp, pero Jordan volvió y los Bulls volvieron a llegar a las semifinales de conferencia.
Con la llegada de Jordan y la incorporación de Dennis Rodman los Bulls volvieron a ser lo que eran y ganaron 3 anillos consecutivos hasta que en el año 1998 esos Bulls se disolvieron; Jordan se retiró, Rodman se fue a los Lakers y Pippen se fue a Houston.

Pippen dejó Houston y se fue a Portland; rindió bien en Portland el primer año (les llevó hasta la final de conferencia) y después empezó una debacle que en el año 2004 tras firmar con los Bulls terminaría, ya que el Arkansas se retiraría al año siguiente.

En el año 2007 se reveló que Pippen tenía grandes deudas por sus fracasos en inversiones y tuvo que jugar en la liga finlandesa para ganar algo de dinero, triste final para una leyenda de tal dimensión.



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Algunas notas a pie de la expedición a Londres

(Artículo de nuestro nuevo colaborador "Fadewaysaurio")

Mi espía JM, destinado en Toronto, me hizo llegar ayer una pequeña misiva en la que me informó minuciosamente sobre su reciente expedición a la capital inglesa.
El pasado 4 y 5 de marzo, él y el equipo con el que se desplazó a Londres disputaron dos partidos contra los New Jersey Nets, de los que resultaron perdedores.
Como seguidor de los Raptors, y partiendo del análisis que me ha enviado mi agente, quisiera hacer algunas anotaciones, estrictamente deportivas o no, de lo que dio de sí esta primera experiencia de la NBA lejos del territorio americano.



En el plano baloncestístico, hay mucho que reprochar a Toronto, aunque no más que lo de costumbre. Los problemas básicos radican en la confección descompensada de la plantilla, y en esta pequeña gira internacional han vuelto a quedar en relieve.
No hay pívots que valgan. El hecho de que Andrea Bargnani sea considerado "C" por nba.com, y que el mayor esfuerzo de renovación del pasado verano, valorado en la friolera de 35 millones, correspondiera a la continuación del bisoño y débilmente intimidatorio Amir Johnson, evidencia esta inferioridad zonal.
Pues bien, ante una pareja de pívots que no es ni mucho menos la más física ni talentosa de la liga, volvimos a perder, en ambos partidos, el parcial del rebote. Además, tanto Humphries como Lopez (los pívots titulares de los Nets) se mostraron sorprendentemente acertados en la anotación: en el primer partido el tándem sumó 43 puntos, y en el segundo, 54.

Por no cargar todas las culpas contra los altos, digamos que a los bases tampoco les debió sentar muy bien el cambio de aires. Calderón tuvo el punto de mira torcido en los dos partidos, presentando paupérrimos porcentajes y si bien Bayless pareció entonarse un poco en el segundo, en el primero rondó la invisibilidad.
En el primer duelo no tuvimos posibilidad alguna de ganar, y fue una derrota fácilmente asumible. Al fin y al cabo, aquel viaje a Londres era una moneda al aire y era de presumir que se perdiera uno de los dos. Pero el hecho de tener tan cerca la victoria en el segundo, y el haber desaprovechado nuestra oportunidad de aquella manera, fue lo que me enfureció.
Dispusimos de tres posesiones para ganar que invertimos en tres tiros perimetrales (dos de Bargnani, y otro de DeRozan), absolutamente desprovistos de sistemas, estrategias de pizarra o planteamientos ofensivos de rigor. Triano rules: aclarado para el jugón. Los Raptors merecieron perder.

Ya al margen de los partidos, hubo detalles de la gira que me hicieron entender lo lejos que queda la incorporación de Europa al baloncesto NBA. Se le puede obligar a Deron Williams a ponerse una cinta con el logo de la liga por mal que le quede, pero veo más difícil que se le imponga a las reinonas del campeonato un viaje de estas dimensiones en mitad de la temporada regular.
Hablo precisamente de los equipos que se quieren ver aquí: Celtics, Lakers, Heat, Spurs… equipos para los que la resistencia física de sus jugadores lo es todo; y los que dudo que pretendan poner en riesgo la continuidad y la fluidez de sus plantillas con un evento tan engorroso como un partido en el extranjero. El hecho de que las franquicias invitadas a la cita de este año fueran Toronto y New Jersey (antepenúltimos y ante-antepenúltimos de la conferencia este respectivamente) indica lo mucho que nos queda aún por ver baloncesto americano de verdadera calidad en Europa.
Además de ese notable inconveniente, está el hecho de que la economía en Europa no parece estar en su apogeo, y que resultará complicado abrir vías de contacto con la NBA más allá de Londres, al menos a corto y medio plazo.
La inglesa es una capital que siempre ha tenido estrechas relaciones con la liga de baloncesto americana (así como la de fútbol) por diversas razones económico-culturales, pero creo que el mercado del resto del continente se mostrará algo más reticente a invertir patrocinio en un campeonato de allende los mares.
De momento se han oído rumores de partidos en Bilbao (ah, generosa locomotora de esta pobre piel de toro), pero estas elucubraciones son cada vez más difusas y yo no pondría las garras en el fuego.

Otro éxito del espía JM. Una gira europea por cada fadeway.

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sábado, 5 de marzo de 2011

San Antonio aplasta a los Heat

No hay otra palabra para definirlo, los San Antonio Spurs han aniquilado literalmente a los Miami Heat esta noche en el encuentro disputado en el AT&T Center.
El conjunto de Gregg Popovich mostró las vergüenzas del cuadro de Spoelstra ya que el conjunto texano se vió en todos momentos por delante del marcador, derrotando finalmente por 125 a 95 al conjunto de Florida.



Ya en el primer cuarto los Spurs comenzaron a hacer sangre a base de triples y del liderazgo de Manu Ginóbili que anotó la escandalosa cifra de 11 puntos en el primer cuarto.
A la fiesta se sumó un inesperado Tony Parker del que se dijera que estaría de 2 a 4 semanas de baja, sorprendio a todo el mundo apareciendo en el quintento titular de los Spurs.

El conjunto texano se pusó a la cabeza tras un primer cuarto sensacional, tras liderar el marcador en 24 puntos, en el segundo cuarto parecía que los Miami Heat comenzaban a reaccionar, pero todo fue un breve espejismo ya que los Spurs volvieron a poner la directa y comenzaron a seguir aumentando la diferencia entre ambos conjuntos.
Finalmente el último cuarto prácticamente sirvió de descanso para los titulares de ambos equipos, ya que el partido estaba totalmente decidido.
Los Spurs con un récord de 51-11 sigue demostrando de esta forma su candidatura cómo uno de los principales aspirantes al anillo y no es para menos, ya que de momento el conjunto de Popovich posee el mejor récord de la temporada regular.

Los Heat siguen sin convencer, el récord de 43-19 se aleja cada vez más del de conjuntos cómo los San Antonio Spurs, pero lo que más debe asustar a los aficionados de los Heat debe ser el récord que el conjunto de Spoelstra posee ante los cinco primeros equipos de la NBA.
En 9 encuentros ante las cinco potencias, los Heats sólo han logrado sumar una victoria.

En los Spurs nada más y nada menos que ocho jugadores lograron sobrepasar la barrera de los diez puntos, destacando principalmente Manu Ginóbili con 20 puntos y 7 asistencias, el francés Tony Parker con 15 puntos y 8 asistencias y el peculiar Matt Bonner que logró 18 puntos con 6 de 7 en triples, su estilo extraño a la hora de lanzar le esta dando un gran resultado al jugador de los Spurs.
Por parte de los Heat poco se puede destacar, el mejor por parte de Miami fue Lebron James, logrando 26 puntos y 11 de 19 en tiros de dos.

De esta forma los San Antonio Spurs confirman más su condición de sólidos líderes mientras los Miami Heat siguen sembrando dudas, primero fue la bochornosa remontada ante los Magic y ahora esta paliza infligida por los Spurs.

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martes, 1 de marzo de 2011

Leyendas: Oscar Robertson

Nombre: Oscar Palmer Robertson
Fecha de nacimiento: 24 de noviembre de 1938
Lugar de nacimiento: Charlotte (Tennessee)
Altura: 1´96m.
Peso: 100kg.
Posición: Base

Trayectoria
- 1957/60: Universidad de Cincinnati
- 1960/70: Cincinnati Royals
- 1970/74: Milwaukee Bucks

Palmarés
- 1 campeonato de la NBA (1971)
- 1 MVP de la NBA (1964)
- 12 veces "All-Star"
- 3 veces MVP del "All-Star" (1961, 1964 y 1969)
- "Rookie" del año (1961)
- 1 oro olímpico (Roma 1960)
- En el equipo ideal del 50º aniversario de la NBA
- En el "Hall of fame" (1980)



Oscar Robertson fue el primer gran “all-around player”, un jugador capaz de anotar, asistir o rebotear, Robertson, maestro del triple-doble destacó por su gran versatilidad y su capacidad para dominar númerosas facetas del juego.
Tras unos inicios duros en el instituto dónde tuvo que luchar contra el racismo y la pobreza, “The big O” dio el salto a la Universidad de Cincinnati, en la que jugó tres campañas, quedando en todas ellas cómo máximo anotador nacional.

El gran juego desplegado en la universidad le valió para ser drafteado en el primer puesto de 1960 por los Cincinnati Royals (actuales Sacramento Kings).
Su elección por los Royals se producía después de ganar los Juegos Olímpicos de Roma junto a jugadores de la talla de Jerry West, Walt Bellamy o Jerry Lucas.

Su temporada “Rookie” fue simplemente espectacular, promedió 30´5 puntos, 10´1 rebotes y 9´7 asistencias.
Robertson rozó el triple-doble de media en su primera temporada, sus fantásticas cifras le valieron para ser “Rookie del año”.
El base de los Royals ya era toda una estrella, confirmó ese estatus en los “Play-off” de esa temporada, llegando a promediar un triple-doble, algo que jamás nadie ha igualado en unos “Play-off”.
Los 30´8 puntos, 11´4 asistencias y 12´5 rebotes por partido son todavía algo digno de la calificación de legendario.

Pese a ser uno de los grandes, en sus seis temporadas con los Royals nunca logró un título de la NBA, ya que siempre caía derrotado ante conjuntos cómo los Celtics o Sixers.
Pese a ello, “Big O” logró el MVP de la temporada 1964, superando a estrellas como Wilt Chamberlain o Bill Russell.

En 1970, llegaba al banquillo de los Royals una leyenda de la NBA, el mítico jugador de los Celtics, Bob Cousy, se hizó con las riendas del conjunto de Cincinnati.
Pero el técnico no estaba contento con Robertson y decidió traspasarlo a los Milwaukee Bucks.
En los Bucks, Robertson se encontró con un joven pívot recién drafteado, Lew Alcindor.
Lew Alcindor tras su conversión al islám se convirtió en Kareem Abdul-Jabbar, el legendario pívot, de esta manera Robertson pasaba a jugar con otra de las grandes leyendas de la historia del baloncesto americano.



1971 fue el gran año de la estelar pareja, los Bucks terminaron la temporada regular con un impresionante 66-16 y en los “Play-off” arrasaron literalmente en las finales de la NBA a los Baltimore Bullets consiguiendo derrotarles por un contundente 4-0.
Era el primer y último título de la NBA para Oscar Robertson.
La pareja Robertson-Jabbar siguió junta varias temporadas más, llegando incluso de nuevo a las finales de la NBA en 1974 ante los Celtics de John Havlicek, Westphal, Cowens y compañía.
Pero en esa ocasión, Robertson no logró repetir título, ya que perdió ante los de Boston en el séptimo partido.

Esa era su última temporada, la temporada de un genio que revolucionó el baloncesto.
Un genio que había sido capaz de anotar, asistir y rebotear, algo nunca visto hasta su llegada.



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